Y llegan a pasarse una media de 2,8 horas volando sobre las olas, lejos de la costa, como alternativa a los reposaderos. Es uno de lo llamativos hallazgos de
este interesante artículo acerca del impacto sobre los correlimos comunes (en este caso
Calidris alpina pacifica) de la recuperación de las poblaciones un depredador directo como es el halcón peregrino. Otra de las estrategias que adoptan los primeros es reducir sus reservas de grasa durante el invierno, a fin de volar (escapar) con más facilidad.
Que se lo pregunten a los de la ría, el que los traía estresado el día 26 era un joven Halcón peregrino, que después de varios picados, se marcho sin hacer presa.
ResponderEliminarNunca me hubiese imaginado que la ría pudiese ofrecer la posibilidad de ver tantas rapaces: águila calzada, gavilán, azor,cerícalo, hálcón peregrino,ratonero, milano negro, y me imagino que tendrás alguna cita de ¿esmerejón ?¿algún agulucho?
Saludos
Hola Marcos!
ResponderEliminarQue yo sepa, se han observado en la ría como dices águila calzada, gavilán, azor, cernícalo, hálcón peregrino, ratonero y milano negro, y además esmerejón, águila pescadora, alcotán, halcón abejero, y, hace pocos años, un halcón sacre muy probablemente escapado. No recuerdo que se haya visto, en fechas recientes, ningún aguilucho.
Hola Tñt.
ResponderEliminarMuy interesante el artículo del enlace. Citaré en el blog de Aves en Gijón lo que has puesto en tu blog, para que la gente se pase por aquí y lo lea.
Cuidaros.
Nacho.