8 de diciembre: entre chubasco y chubasco... 15 espátulas

 Antes de ir a la ría, me acerqué un rato a las islas de San Pedro para comprobar si el temporal de vientos del noroeste movía algo en el océano. 

Observé algo de paso: un frailecillo, varias alcas y araos,  alcatraces, pardela balear, bastantes gaviotas tridáctilas, unas cuantas cabecinegras, negrones... También delfines comunes.

Un busardo ratonero que sobrevoló el pequeño archipiélago cuando ya me iba convirtió fufagzmente a los cormoranes posados en tan aficionados a las aves en paso como yo:

Ya en la ría, con la marea bajando y los chubascos sucediéndose, decidí limitarme a mirar, sin censar. 

¡Bastante tenía con el paraguas, los prismáticos, la cámara y el telescopio! Andaban por aquí los cinco ánades silbones que van y vienen este otoño. este es uno de ellos:

Además, había un buen número de espátulas, para este estuario: 15. 

Una de ellas, marcada con anillas de colores en Holanda hace 5 años (¡gracias como siempre por gestionar de manera tan eficaz estas aves marcadas, Antonio Gutiérrez!):

Cuando apareció un águila calzada...

...echaron todas a volar. Igual que las garzas, garcetas, limícolas, patos... Pero no tardaron en posarse de nuevo.

Otras aves que la lluvia me dejó ver fueron:

Ánsar piquicorto
Cisne vulgar 
Ánade azulón 
Negrón común 
Zampullín común 
Paloma torcaz 
Rascón europeo 
Ostrero euroasiático 
Chorlito gris 
Zarapito trinador 
Aguja colipinta 
Aguja colinegra 
Correlimos gordo 
Correlimos común 
Archibebe claro 
Archibebe común 
Gaviota reidora 
Gaviota cabecinegra 
Gaviota patiamarilla 
Gaviota sombría 
Garza real 
Garceta común 
Garcilla bueyera
Martín pescador común 
Urraca común 
Corneja negra 
Estornino pinto 
Estornino negro 
Mirlo común 
Petirrojo europeo 
Lavandera blanca 
Bisbita pratense 
Bisbita costero