![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKc0KLS05pIEP1VYk_W1aPGjfQkGaxg_4ygWHBsWsCu_d6KBGFzj_Gf4DZwB7QRC5c2nHK4KJ7svEp0jZgefWTHR6ymwcUgRFfuJ7Dq-maKb8xRnSq3j5kh0u66CzOwsI0SqA-/s320/lancha.jpg)
La mayoría de los trinadores (28) iban y venían buscando dónde posarse, muy inquietos a causa del intruso grande, blanco y ruidoso que arrastraba a un primate. Un primate que debía estar pasándolo realmente mal, a juzgar por sus aullidos. Esta aguja colipinta, sin embargo, había encontrado un rincón bien cómodo entre la vegetación, y dormitaba ajena a los cientos de paseantes que aprovechaban la tarde de domingo a pocos metros de ella:
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEissvCOOaYaV2sNoKzYPkzOq_9wOHnU2VTfzd4dozQx3_uxbpL2AONvVuYSHsTte0eVYWhqYdEh9kDyp-wO_GVxRQGFD_5fnM9pVt5zHwXJtzk7AjKvxK1DdZDVHdAh1Fh33mlW/s320/aguja1.jpg)
Según iba retirándose la marea fueron bajando a la orilla más aves: 3 correlimos comunes (nuevos), 3 chorlitejos grandes (nuevos), 1 archibebe común, 2 charrancitos (al menos 1 nuevo) y 1 vuelvepiedras. Las gaviotas cabecinegras eran 24, y había además 1 gavión de 2º año, 4 garcetas comunes 8al menos 2 nuevas) y 1 garza real.
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