8 de abril: gaviotas manchadas y correlimos tridáctilo en el dique de abrigo

Ayer por la tarde en el dique de abrigo del puerto de A Coruña, de 70 grandes gaviotas (L. fuscus y L. michahellis) presentes, 5 de ellas mostraban el vientre petroleado. En lo que va de año no había visto ninguna manchada allí.

Precisamente ayer La Voz de Galicia recogía esta noticia:

Avistadas de Cee a Valdoviño unas sesenta aves petroleadas

Los expertos lo atribuyen a un sentinazo o a los restos de combustible del «Kea»

Salvamento Marítimo peinó ayer con el helicóptero Helimer 210 la zona en la que se hundió hace más de una semana el mercante Kea para controlar la evolución de la mancha de combustible que liberó el barco. Ni rastro, informaron desde el órgano dependiente del Ministerio de Fomento. Sin embargo durante la Semana Santa fueron avistadas más de medio centenar de aves petroleadas desde Cee, en la Costa da Morte, hasta Pantín, en Ferrolterra.

Un foro que los socios de la Sociedade Galega de Ornitoloxía (SGO) tienen en la Red, denominado Galicia Aves, revela que desde el pasado día 1 -el naufragio se produjo el 30 de marzo- diferentes especies de gaviotas -patiamarillas (Larus michahellis) , sombrías (Larus fuscus), argénteas (Larus argentatus) y delaware (Larus delawarensis) - se dejaron ver por la costa manchadas de hidrocarburos.

Juan Rodríguez Silvar, biólogo ferrolano y miembro de la SGO, cree que «quizá poda deberse aos restos de fuel do mercante afundido ou a algún sentinazo». El cántabro Jesús Menéndez, aficionado a la ornitología, se encontraba de vacaciones en la Costa da Morte, cuando divisó sobre unas ocho aves manchadas de chapapote en cabo Vilán, Camariñas, cabo Touriñán y Muxía. «Algunas estaban muy sucias», comenta este cántabro, que a su regreso a Castro Urdiales contempló otros ejemplares impregnados de chapapote. «Son animales muy viajeros», apostilla.

El ferrolano Antonio Gutiérrez, socio de la SGO, acudió a la playa de Pantín, en Valdoviño, hace unos días y se encontró con bandadas de gaviotas sombrías de unos 300 ejemplares en las que «no menos de cuarenta estaban petroleadas en distinto grado». Diez de ellas, calcula, tenían más de la mitad de su cuerpo impregnado de chapapote.

La laguna de A Frouxeira, en Valdoviño; Doniños y Esmelle, en Ferrol, y Lires, en Cee, son otros lugares de la costa gallega en los que se avistaron aves tintadas.

Rodríguez Silvar señala que las gaviotas tienen más posibilidades de sobrevivir tras entrar en contacto con hidrocarburos que otras especies. «Pasan más tiempo en tierra, sin embargo otras aves tratan de limpiarse en el agua, pierden la permeabilidad de las plumas, se enfrían y acaban muriendo».

Hoy Salvamento Marítimo tiene previsto retomar el rastreo, aunque, señalaron desde el órgano, la Agencia Europea de Seguridad Marítima, que analizó la mancha a través de imágenes de satélite, concluyó que no había afloramiento de combustible.


Además, descansaban en los muelles flotantes un par de correlimos tridáctilos.